¿En qué consiste una endodoncia?
El procedimiento consiste en eliminar esas bacterias que se encuentran en los conductos afectados, eliminando totalmente o en parte, según lo requiera cada situación, la pulpa del diente para sellar el conducto.
El paciente no sufrirá ningún dolor a lo largo del proceso, ya que previamente se le habrá anestesiado la zona en la que se va a practicar la endodoncia. Una vez el paciente tiene la zona del diente dormida, puede comenzar el procedimiento. Lo primero que van a realizar los profesionales dentales es un agujero en la parte de la corona del diente, ya que es la única vía que existe para acceder a la parte de la pulpa. Después se procede a extraer dicha pulpa y a continuación a limpiar el conducto.
Por último hay un proceso de obturación y se procede a sellar el conducto y de la corona. El resultado final será el de un diente completamente insensibilizado y que dejará de molestar y de provocar dolor al paciente. Posteriormente al procedimiento de la endodoncia se realiza un seguimiento del paciente para comprobar que no haya habido complicaciones y que esté llevando una evolución adecuada.
Como podéis comprobar, la endodoncia se trata de un procedimiento realmente sencillo y que no supone ninguna complicación para los profesionales bucodentales.